"... esta obra que se inaugura es una consecuencia de tener los valores que nos han impregnado nuestros padres, nuestros abuelos; en creer que teníamos que hacer obras para que no la disfrute una familia, sino una comunidad. Esto no se hace desde el individualismo, sino de tratar de conformar un grupo que tenga una visión compartida, para que el grupo se transforme en equipo".
" ... esta obra es la consecuencia del valor de la tolerancia, algo que nos hace falta en este país, intercambiar ideas, compatibilizar; y no podemos ser tolerantes si no somos humildes. La humildad es una garantía social, la soberbia es la antesala de todos los fracasos."
"... provenimos de una vertiente en donde todo nos costaba mucho esfuerzo, nadie nos regalaba una pelota, esa pelota la teníamos que comprar entre 20 pibes o llenar el álbum de figuritas, donde todos éramos socios de ese gajo de la pelota, y la cuidábamos y añorábamos quién tenía esa pelota un día en su casa, y con eso íbamos a jugar toda la tarde en un campito..."
"... la línea imaginaria de buena fe demarcaba cuándo una pelota estaba adentro o afuera, no había travesaño y jugábamos toda nuestra fortuna a que, quién hace el gol gana, porque se venía la noche, pero queríamos esa pelota que nos había costado tanto, y le impregnábamos tanto amor a ella, tanto afecto, que esa pelota tenía corazón; y el gran problema es que nos metieron tanto egoísmo que nos terminamos peleando por una pelota y cuando somos grandes aquellas cosas que eran importante, son miserias..."
2 comentarios:
Excelente, casi había olvidado ese espíritu.
Que lejos estábamos de ponernos a medir éxitos o fracasos. Solo amábamos jugar, y jugando casi sin darnos cuenta solíamos conseguir lo que queríamos. Entre todos...para todos. Eso se llamaba amistad.
Alguna vez fuimos leales, solidarios, buenos amigos... Alguna vez fuimos felices.
sergio Gola
Gracias Jorge por copiar esto que está muy bueno.
el colo
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