Dar la bienvenida a la edad adulta (en términos atléticos), es aceptar que uno debe sufrir para alcanzar su potencial. Este sufrimiento no es lo que se tiene que hacer o vivir durante una sola práctica, en un trabajo difícil, sino el sufrimiento que se acepta vivir durante todas las prácticas
Durante el sufrimiento, uno busca muchas motivos para no seguir haciendolo:
- La escuela: que es lo más importante a esta edad. Se necesita aprender a administrar y a planificar TU TIEMPO, esto es una cosa de adulto. La novia o el novio: discúlpame, pero no debe estar para nada en esta ecuación, pero es una realidad, es algo social. Si quieres ser un gran atleta vas a tener que entender esto. Establecer prioridades en TU DIA, haciendo cosas que son productivas, esto es una cosa de adulto.
- El cansancio: acostúmbrate, no eres el primero en pasar por ahí. Esto combina la administración de TU TIEMPO y el saber dar prioridad a lo importante. Estás desperdiciando TU DIA haciendo cosas que no te benefician, o no tienes suficiente tiempo para descansar porque estás perdiendo TU TIEMPO en otras cosas.
- El dolor: es parte del ser atleta. El dolor no termina cuando termina la práctica. Aprende a hacerte un tiempo para estirar en la noche y así prepararte para los siguientes días de entrenamiento.
Cuando te das cuenta de todo lo que se necesita para ser un gran atleta, deberás aceptar algunas realidades:
¿Realmente tienes el TIEMPO PARA SER un gran atleta?
¿Son tus demandas de la escuela o las demandas sociales demasiado grandes?
Suele hablarse de los bailes y las fiestas a las cuales el atleta no puede ir, el no poder salir con amigos, o ir al cine, como un "sacrificio". Sin embargo, los atletas le dan simplemente una prioridad más alta a su deporte y no sienten esto como un sacrificio. Raramente escucharás a un gran atleta hablar de lo que él "no ha podido hacer," al contrario, te hablará de lo que ha logrado. También escuchas a grandes atletas hablar de cómo NUNCA harían otra cosa diferente. Apuesto que si escuchas a alguien decir que le hubiera gustado hacer otra cosa, nunca sería a un gran atleta.
No tienes que tener el potencial de ser atleta olímpico para vivir la vida de un Campeón Olímpico. Las Olimpiadas o competencias de ese nivel, duran apenas algunos días. La preparación para alcanzar ese potencial (o tu propio potencial) toma AÑOS. Cuando un atleta olímpico y un atleta que ha alcanzado su potencial hablan, pueden comparar las historias de sus respectivas preparaciones, las historias de cómo manejaron su tiempo, de cómo manejaron el dolor, cómo encontraron un equilibro en sus vidas. Para llegar al punto.... sufrieron.
En mi opinión, nuestro ingreso a la edad adulta como atletas es sufrir. Pero es un tipo muy específico de sufrimiento. No es el sufrimiento puesto sobre nosotros por nuestros entrenadores, sino el que hemos elegido poner en nosotros mismos cada día de la semana, por años, para obtener lo que deseamos.
